Vamos hacia Volterra pasando por famosas bodegas y viñedos como bodega Lombardo en Graciano, viña La Fratta en Sinalunga y ente San Gimignano y Volterra bodega Il Palazzo. Apellidos de Volterra: Cacciagli.
Vamos ascendiendo hacia Volterra, el conjunto es espectacular, en alto, altísimo, con una fortaleza Medicea totalmente conservada, ruinas arqueológicas muy extensas, puertas de entrada a la ciudad etruscas, con sillares que son casi ciclópeos, la piedra es oscura. La plaza dei Priori es increíble, toda formada por palacios góticos y renacimiento, incluso hay un edificio románico.
Vamos al Museo Etrusco, que es ya cargante porque tiene tantas cosas etruscas como para dotar a 20 o 25 museos, sólo urnas funerarias con esculturas encima puede haber unas quinientas, y así todo lo demás.
El paisaje está entre montaña y campiña, tiene sembrados de cereal, olivos, bosque y ya en esta altura no hay viñas, pero un poco más abajo sí. Pertenece a Pisa, pero está cerca de San Gimignano, que pertenece a Siena. Comimos aquí en una terraza en una de las plazas. Cerca de la puerta etrusca descubrimos un taller de alabastro, el artesano se había ido y en la puerta había un canasto lleno de trozos de alabastro desechados, un cartel decía: 1 Euro el trozo, elegimos uno y dejamos el euro. Por el camino hacia San Gimignano hay una villa esplendorosa, Villa Dini.
Llegamos a Colle di Val d´Elsa , está subido a un promontorio a la altura de la carretera que traemos, todo el casco histórico se sitúa sobre ese promontorio de forma longitudinal a partir de la puerta monumental de las murallas y abajo en la llanura está la ciudad nueva, se ven muchas factorías que deben de ser de cristal porque aquí se fabrica un cristal excelente. Por la calle por la que entramos hay un montón de palacios del XVI, al final de la calle un puente, otra puerta monumental y el castillo. Los palacios que vamos viendo se llaman Campana, Luci, Buonacorsi, Giusti…
Llegamos a la plaza del Duomo, también está el Museo arqueológico, hay un balcón de hierro, con dos filas horizontales y paralelas de macetas, la de arriba de flores rojas y la de abajo violeta. La Catedral es de planta central , veo un crucifijo de madera de Juan de Bolonia, Gianbologna para los italianos. Más palacios con escudos Médicis, en las puertas leemos apellidos como Manzini, Bandinelli, Balli.
Tropezamos con la casa de Arnolfo di Cambio, con una gran torre.
Más apellidos: Tagliaferri, Tanacci, ahora viene el palacio Apolloni. En una tienda que da al paseo de la muralla hay preciosas objetos de cristal, más abajo compramos dos trozos de los que se rompen que sirven de pisapapeles, Miguel escoge uno verde y yo uno azul. Compramos fruta y queso y nos vamos hacia Chianciano.
En el hotel seguimos estando solos, la tranquilidad es total, cuando llegamos a recepción nos preguntan donde hemos ido hoy y estamos un rato hablando.
...continuará.
Texto: Ximena Prieto Álvarez
Fotografías: Miguel Roa Guzmán
No hay comentarios:
Publicar un comentario