jueves, 14 de diciembre de 2017

Por los cerros de Úbeda y el cercano Puente de Ariza en la provincia de Jaén


Breve paseo por Úbeda:

Las ciudades jiennenses de Úbeda y Baeza están declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad especialmente por concentrarse en ellas las obras renacentistas más importantes de España.

Estamos alojados a no demasiados kilómetros de Úbeda y hemos decidido volver a recorrer algunas de sus calles aunque sea dando un corto paseo.

Úbeda es la capital de la Comarca de la Loma, la mitad de su población sigue dedicándose a la agricultura (olivar) pero la otra mitad trabaja en el sector terciario, su importancia actual se debe a su riquísimo patrimonio fruto de su esplendor pasado, al parecer hacer 6.000 años ya existía esta ciudad que ha visto pasar toda la historia de España en ese tiempo.

Palacio de los Dávalos o Casa de las Torres, actualmente la Escuela de Arte:





Palacio de la Rambla:



Palacio de Úbeda:





Palacio Vela de los Cobos:



Edifico del Ayuntamiento en la plaza del mismo nombre:


Palacio Juan Vázquez de Molina o Palacio de las Cadenas, sede del Ayuntamiento:

Plaza Vázquez de Molina con el edifico del Ayuntamiento:

Basílica de Santa María de los Reales Alcázares:

Fuente en la Plaza Vázquez de Molina:

Sacra Capilla del Salvador, templo construido bajo el patrocinio de Francisco de los Cobos (secretario del emperador Carlos V) como panteón anexo a su palacio. La obra fue encargada a Diego de Siloé pero finalmente fue realizada por Andrés de Vandelvira:


Palacio del Deán Ortega, actualmente Parador de Turismo, uno de los más antiguos de España inaugurado en tiempos de Alfosnso XIII en 1930:


Fachada del Salvador:





Indudablemente Úbeda merece una visita mucho más detallada, pero sirva este aperitivo para que deseéis conocerla y vayáis a visitarla.

El Puente Ariza:

Construido en el siglo XVI siguiendo los planos del arquitecto y cantero renacentista Andrés de Vandelvira en la carretera que unía Úbeda con la meseta castellana.

Fabricado con sillares de piedra con cinco bóvedas de cañón, superando los 31 metros de luz la central. Sufrió a lo largo del tiempo diversos refuerzos y actualmente está fuera de servicio y cuando el embalse de Giribaile sube su nivel (actualmente, otoño de 2017, está prácticamente vacío por la sequía) queda sumergido en sus aguas:






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