Toro es uno de los municipios más importantes de la provincia de Zamora con una larga historia que nos van mostrando sus muchos monumentos, empezamos la visita entrando por la Puerta de Corredera, construida en 1602 en honor de Felipe III:
Nos vamos encontrando en algunas casas en ruinas distintas pintadas para adecentarlas con motivos alegóricos al vino de esta zona, Toro es la capital de la Denominación de Origen del mismo nombre:
Atravesamos la Puerta del Mercado con su Torre del Reloj:
Y llegamos a la Plaza Mayor:
En la misma Plaza Mayor nos encontramos con la Iglesia del Santo Sepulcro que perteneció a la Orden del Santo Sepulcro hasta que pasó en el siglo XV a la Orden de Malta en ella podemos apreciar además de su arquitectura numerosas tallas de gran valor:
Retrocedemos por la calle Mayor para ir en busca de la Iglesia de San Lorenzo el Real, una preciosa construcción románica en ladrillo que actualmente se exhibe como museo:
Nos acercamos ya a visitar la joya arquitectónica de Toro que es la Colegiata de Santa María la Mayor, su construcción se inicia en el siglo XII dando lugar a lo largo de su construcción al paso del románico al gótico:
Destaca en su interior la portada de la Majestad del siglo XIII que conserva su policromía, una preciosidad que casi parece irreal:
En la Sacristía se exiben diferentes obras artísticas religiosas:
Desde su torre hay unas estupendas vistas de los alrededores, del río Duero y de algunas formaciones del terreno:
Interior de la Colegiata:
Exterior de la Colegiata de Santa María la Mayor:
El río Duero a su paso por Toro:
Nos acercamos para poder ver la Iglesia de San Salvador de los Caballeros, de estilo románico-mudéjar es del siglo XIII y perteneció a los Templarios hasta su desaparición, actualmente es museo:
Pasamos por el Palacio de los Marqueses de Alcañices, del siglo XVI, donde pasó sus últimos días el Conde-Duque de Olivares:
Visitamos San Sebastián de los Caballeros, aunque su construcción se inicia anteriormente su interior nos muestra ya el estilo gótico con unos preciosos murales que se conservan en muy buen estado:
Retablo barroco:
Pasamos por un Postigo abierto en la muralla que rodea todo el centro de la ciudad:
Soportales en la calle Mayor:
En el Palacio de los Condes de Requena se encuentra, entre otras instituciones, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen del Vino de Toro:
Pasamos por la plaza y parque de San Francisco con su templete para la música:
Iglesia de Santa María de Roncesvalles y Santa Catalina:
Residencia para mayores Virgen del Canto:
Verraco celtibérico, hay quien dice que es un toro y que de ahí le viene el nombre a esta ciudad:
Y aquí terminó nuestra visita a Toro, a pesar de todo lo que hemos visto aun nos quedan muchas cosas que ver y disfrutar en esta bonita ciudad que sin duda merece una nueva visita.
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