sábado, 20 de abril de 2024

Tarragona, marzo de 2024: Tarragona y Acueducto de Les Ferreres (II)


 

Viaje a TARRAGONA, marzo 2024

8 de marzo, viernes

Continuamos en la catedral de Tarragona y accedemos al claustro. El Claustro muy hermoso, con su pozo, su ciprés y otra capilla con una Virgen de talla románica. 






























En el resto de capilla está el museo con tablas flamencas e italianas desde el Trecento al Siglo XV.































Después de la visita bajamos, pegados a la muralla y llegamos a la plaza del Pallol, que sería el espacio del Foro de la provincia, donde vimos la maqueta de la Tarraco romana. En ella se distinguen el Pretorio, los dos foros, el anfiteatro, el circo y el teatro, del que no quedan apenas restos. También vemos  un audiovisual proyectado contra las paredes cuya protagonista es una esclava griega y va explicando la vida en la Tárraco romana.
















Vamos a comer a la plaza del Forum,  que está en el otro extremo de la ciudad antigua y por la que ya pasamos antes, en una terraza de un bar que se llama la Casa del Vermú, donde te ponen un caldero de Zinc con una botella de vermú y otra de soda y te sirves lo que quieras. Comemos caracoles con salsa picante, una pata de pulpo y unos aperitivos compuestos de aceitunas, ensaladilla rusa, patatas fritas de la casa, boquerones y sardinas. Charlamos con la camarera cuyos abuelos eran de Loja y con unos vecinos de mesa, barceloneses que venían a pasar el día o el mediodía.









Después de comer bajamos a ver los restos del circo y así llegamos a la plaza donde está el ayuntamiento, la plaza de la Font y ya a la zona donde empieza el ensanche, la Rambla Vella y la Rambla Nova. El parking nos cuesta 13,45 euros y la comida 52 euros.















Pensamos volver otro día porque nos quedan cosas que visitar, pero ahora nos dirigimos al acueducto romano de Les Ferreres, a 4 Km al Noroeste. Está al lado de la autopista en una zona de pinares, en plena naturaleza, el único problema es el ruido de los coches, el acueducto se conserva perfectamente, tiene doble arcada de medio punto sobre pilares y unos senderos para pasear. El resto de la tarde la dedicamos a ver un poco de Salou y la Pineda.















Textos: Ximena Prieto Álvarez

Fotografías: Miguel Roa Guzmán


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